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La increíble épica

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jueves, 8 de noviembre de 2012

THE BARRENS



ESTADOS UNIDOS, 2012

TÍTULO ORIGINAL: The Barrens
DIRECTOR: Darren Lynn Bousman
PRODUCTOR: D.L.Bousman, J.Eckert, R.Saperstein, B.Witten
GUION: Darren Lynn Bousman
REPARTO: Stepehn Moyer, Mia Kirshner, Allie MacDonald
DURACIÓN: 94 minutos




No suelo fijarme mucho en los directores de cine, soy más de mirar la sinopsis y como mucho el reparto (pero en casos contados) para decidir si ver una película, pero pese a esto, al igual que todo el mundo, también tengo algunos nombres que son suficiente para llamarme la atención en un film. Darren Lynn Bousmanes uno de ellos, no desde hace mucho debo aclarar, solo desde que vi Mother's Day y las dos primeras secuelas de Saw. Aunque como ya digo no me suelo fijar mucho, me da cierta tranquilidad a la hora de ver una película y saber un poco que esperarme y en este caso he acertado en gran parte. 

The Barrens es una película extraña, con eso no digo que sea mala, pero si es bastante confusa y difícil de digerir una vez la terminas. Es de esas cintas que cuando llegan a su fin y apagas el televisor no tienes muy claro si te ha gustado o no. Tiene aciertos y situaciones muy logradas, pero hay algunas lagunas que se notan demasiado y tanto el último tramo con el final de la película, son en mi opinión, precipitados y sin demasiado sentido. 
Para ir entrando en situación, diré que no todo lo que la película nos cuenta es ficción, aunque tampoco sea una realidad. Es cierto que existe una amplia zona boscosa en Nueva Jersey llamada Pine Barrens, lugar al que se asocian tanto la historia como los "avistamientos" del Diablo de Jersey, una criatura que al igual que sus primos; el Bigfoot, el Chupacabra o el mismísimo monstruo del Lago Ness, son muchas personas que dicen haberlos visto, pero todo se queda en leyenda. Como buen film sobre leyendas locales nos encontramos una secuencia donde alguien alrededor de una hoguera explica, tanto para los campistas como para nosotros los espectadores, la supuesta historia del hijo número trece o Diablo de Jersey.
Lástima que la leyenda no pase de ahí durante gran parte de metraje, siendo en mi opinión el fallo principal de esta película. Apenas se toca el tema de la criatura en cuestión, más que en las alucinaciones de Richard, nuestro protagonista y cabeza de familia. Este viajara a Pine Barrens a llevar las cenizas de su padre y una vez allí las cosas se pondrán muy negras. 
El film juega con nosotros tanto como con los personajes de la cinta. Dudaremos al igual que Richardde si lo que vemos es real o no, y esta parte está muy lograda. Vemos como poco a poco el personaje va perdiendo la cabeza, desconfiaremos de todo y de todos y no tendremos ni pajolera idea de cómo terminará la historia. En ese apartado la película queda redonda, transmite todo lo que tenía que transmitir y sobretodo, mantiene nuestro interés por ver cómo acabará toda esta locura y lo más importante, conocer la causa de todo ello.
Pero cuando vamos llegando al final, empezamos a notar el problema que nombre antes; si juntáramos todas las secuencias del Diablo de Jersey, nos quedaríamos con menos de diez minutos de metraje. No quiero decir que esperase una monster-movie, pero quitando un par de momentos puntales esto no es un film de terror, si no un drama mezclado con el thriller, que aunque entretiene, intriga y mantiene en vilo, no es lo que todo buscan al darle al play.
Si pasamos por alto el detalle de que el bicho en cuestión es el que menos protagonismo tiene (ni siquiera sabemos si es real o no, para eso no tendremos respuesta hasta los ultimo minutos de película) y no nos importa ver una película sobre la supervivencia de una familia que acaba perdida en los bosques de Nueva Jersey mientras al marido se le va la chota, entonces si nos encontramos con un film interesante. A parte de poseer una atmosfera muy conseguida, tétrica y bastante verdeen su mayoría, se nota cierto aire onírico en algunas secuencias, como si estuviéramos viendo un sueño y no una realidad. Los efectos especiales también aprueban, tanto el diseño de la criatura como las escasas escenas gore que encontramos, aunque en algún momento se abuse demasiado del CGIno es algo que llegue a molestar. 
Poco más puedo decir de la trama, con lo que he dicho hasta ahora es suficiente para no desvelar nada importante. Tampoco quiero hablar mucho del final, pero siendo sincero creo que podría haber sido más impactante. Lo vi demasiado simple y algo precipitado. Todo ocurre en cuestión de pocos minutos y no da tiempo a asimilar nada con mucha claridad, lo que te deja confuso (o por lo menos a mí, que no conseguí entender muy bien este último tramo) y haciendo varias preguntas sobre la actitud de algunos personajes.
No quiero terminar sin haber hablado del reparto, porque es gracias a él que el film transmita todo lo que transmite. Stephen Moyer hace un buen papel como Richard, su descenso a la locura me recordó (aunque salvando las distancias obviamente) al mismo viajeque realizó Jack  Nicholson allá por el 1980 en el solitario hotel de El Resplandor. Su familia no se queda atrás; tanto Mía Kirshner como Allie MacDonaldhacen bien su papel, destacando por encima a Peter DaCunha dando vida al peculiar personaje de Danny.
Ahora ya despidiéndome, puede deciros que pese a no ser la mejor película de este director (al menos para mi gusto), The Barrens es un film interesante, una mezcla de realidad y ficción que te hace devanarte la cabeza para resolver todo el caos antes que la propia película, pero que una vez llegas al final se te puede quedar un sabor demasiado simplón, dependiendo de las expectativas que hayas creado a lo largo de la cinta. Si eso no te supone un problema, es un film que pese a la lentitud de la trama en su primera parte, sabe mantener la intriga en todo momento y sobretodo, mantenerte a ti pendiente de lo que ocurre en pantalla.


sábado, 20 de octubre de 2012

The Lost Coast Tapes

DIRECTOR: Corey Grant
PRODUCTOR: Chris Beal, Chavez Fraizer, Corey Grant
GUION: Brian Kelsey, Brian O'Cain
REPARTO: Drew Rausch, Rich McDonald, Ashley Wood





















Un grupo de estudiantes/reporteros/periodistas/directores de cine o lo que sean reciben la llamada un hombre que asegura tener el cadáver de un Bigfoot (también llamado sasquacho pies grandes en castellano) y deciden ponerse en marcha para hacerle una visita y como no, documentar cada minuto del viaje para tener pruebas y hacerse famosos. Bajo esta peculiar premisa se encuentra la película The Lost Coast Tapes, un falso documental que a primera vista puede parecernos una versión made in USA de la película Troll Hunter.

Pero no nos engañemos, el mokumentary noruego fue una buena película, con una historia y un guion simples pero entretenidos y las apariciones de los trolls eran increíbles, variadas y sobretodo bien rodadas, sin movimientos demasiado bruscos. El film de hoy es todo lo contrario; la historia aunque no es original, es interesante y despierta nuestra curiosidad con varias sorpresas del guion, pero la manera de llevarla a cabo es desastrosa.

Desde un principio ya se nos muestra que la seriedad no está incluida en la película, tenemos conversaciones que rozan lo absurdo, personajes planos y llenos de clichés y demás tonterías típicas de estas producciones de found footagecampestres.


La primera media hora es un continuo "más de lo mismo" con situaciones que nos suenan de otras películas parecidas y con esa constante sensación de estar viendo un remake de Troll Hunter pero sin gracia alguna. Los minutos pasan y nuestro interés va bajando, nada de lo que vemos convence de que la película vaya a mejorar.

Después de encontrarse con el supuesto cazador del bigfoot (será el mismo que cazaba trolls en noruega?) nos dedicamos a ver y oír durante casi una hora todos y cada uno de los tópicos que todos conocemos: ruidos en el bosque, arañazos en las puertas, moratones misteriosos, rugidos en la noche y demás clichés que al final terminan saturando y que nos hacen preguntarnos por qué seguimos viendo la película y no invertimos mejor nuestro tiempo.


Pero parece ser que el director o los guionistas sabían que la cosa no estaba yendo muy bien en esta primera parte de la película y decidieron, como es habitual últimamente en los falsos documentales, meterle un par de giros de guion en sus últimos veinte minutos para intentar salvar el resto de metraje y que no caigamos rendidos al aburrimiento.

Y aunque parezca una solución típica que no conseguirá nada, en mi caso, si logro su efecto. Puede que un cinco para muchos de vosotros sea una nota demasiado alta teniendo en cuenta que falla en casi todo estrepitosamente, pero los que su tramo final nos deja entrever y lo poco que nos deja ver claramente, consiguió convencerme. Como ya he dicho al principio de la reseña tenían algo bueno en cuestión de trama, pero no lo llevaron bien a la pantalla.


Principalmente se debe a que me parece estupendo que quieran insinuar y dejar que nuestra imaginación vaya por su cuenta, pero esto es pasarse. Te plantean varias dudas durante toda la película (existen de verdad los bigfoots? son buenos o malos? el viejo esta pirado o solo quiere el dinero? es el típico paleto psicópata? hay algo más de lo que preocuparse en el bosque? y alguna más que no pondré para no hacer spoilers, que joden mucho) para luego responder a la mitad y casi sin mostrar ni una imagen de los supuestos "visitantes" nocturnos ni una explicación real a lo que ha pasado.

Pero bueno si dejamos de lado el hecho que se nos insinúa mucho y se nos enseña menos que nada, el tramo final se salva en comparación con el resto de película, tenemos alguna muerte interesante con algo de gore incluso, aunque nada escandaloso. 

El detalle que mas me gusto fue quizá el menos tratado de la historia, y es su escasa pero interesante revelación (casi casi en el último minuto de película) que responde a una de las preguntas que nos hacíamos desde hacía rato al ir uniendo las pocas pistas que da el film. Es curioso como una película que te ha aburrido en casi toda su duración puede dejarte con ganas de saber más solo por sus cinco minutos finales, pero en mi caso es lo que pasó. 


Me atrevo a decir que si se hubieran centrado más en esa historia y menos en las tonterías de donde está el cadáver del puñetero bigfoot o si el granjero es un loco psicópata el film habría sido mucho más interesante y sobretodo, más ameno de ver. 

Como veo que me estoy empezando a ir por las ramas y no quiero terminar desvelando demasiado de su argumento por si algún valiente se anima a tragársela entera como hice yo, voy a ir terminando diciendo que The Lost Coast Tapes es una película mala, con actores mediocres tirando a lo odioso (el de las gafas se lleva la palma), personajes que no transmiten ninguna empatía (vamos, que se mueren y te la suda) y una historia que, aunque vale la pena, no se le ha sacado ni la mitad del jugo. En varios momentos pensé que si la hubieran hecho como un film normal y corriente, sin found footage ni puñetas, la habrían explotado mejor. 

Si estáis aburridos y no os importa tragaros una hora de aburrimiento y situaciones casi calcadas de otras películas, echarle un ojo. Si la aguantáis podéis llegar a sorprenderos con sus últimos y caóticos minutos, aunque eso sí, con escasez de explicaciones.


viernes, 21 de septiembre de 2012

The Barrens

La trama de esta va asi,  con  su reticencia, Richard Marlow lleva a su esposa Cynthia y a sus hijos Danny y Sadie al pinar de Barrens para pasar un fin de semana acampando en familia, pero a  medida que llegan al bosque, se encuentran diversos animales ensangrentados, todo empeora cuando llega la noche y un niño del camping desaparece en el bosque, aún asi, Richard insiste en adentrarse más en el bosque hasta el lugar donde solía acampar con su padre.

Bien es comprensible el sentimiento familiar del protagonista que quiere recuperar parte de su infancia e inculcarles a sus dos hijos lo importante que es tener un refugio, un lugar en el que sentirte seguro e ir siempre que quieran.

El más pequeño lo sigue con los ojos cerrados, pero la chica adolescente solo quiere estar conectada con el móvil y sus amiguitos y pasa bastante de acampadas familiares con una madrastra que no soporta.

Y es que esta película trata sobre todo de la familia, de como el señor Vineyard se lleva a toda la familia de camping con tres objetivos: el de que sus hijos vean y disfruten de la naturaleza, unir más los lazos familiares y esparcir las cenizas de su difunto padre en el lugar en el que él de pequeño había disfrutado tanto.

Hasta aquí parece que os hable de un drama familiar de estos chungos de telenovela, así que nos falta el toque que tanto nos gusta: lo sobrenatural.

En este caso Darren Lynn Bousman apuesta por una historia de un monstruo. Una historia que me ha molado. La del Demonio de Jersey, un bípedo volador con pezuñas similar a un canguro con cara de caballo, cabeza de perro, alas de murciélago, cuernos, brazos pequeños, garras y una cola bifurcada. Vaya que si lo ves te cagas encima, fijo.

Ahora que tenemos una segunda parte descrita nos podríamos encontrar con un típico drama familiar con monstruito que les persigue y corren, se esconden, tropiezan, se asustan y bla bla bla… o sea un survival o algo por el estilo.

Pero menos mal que Bousman se ha vuelto a poner las pilas y cambia lo que podría haber sido otro survival en una película de terror psicológico, mezclado con una pizca de thriller y un final sorpresa –si más no, lo pretende, ya que da demasiadas pistas para que el final no sea tan asombroso como hubiéramos querido-.y es que “The Barrens” nos adentra en la psique de un padre desesperado por salvar a su familia de una ¿paranoia? de la que tan solo él sabe la verdad.

¿Por qué Bousman se ha puesto las pilas? Porque las recargó y aprendió de las soporíferas tres partes de “Saw” que dirigió, para más tarde parir una obra maestra como es “Repo! The Genetic Opera”. Ahí no se puso las pilas, ahí se recargó con toda la central eléctrica entera. Con este musical gótico me dejó el listón demasiado alto y me di de bruces con sus dos siguientes películas. La sobrevalorada “Mother’s Day”, vale la DeMornay está de puta madre pero coño, hace el mismo papel que hizo en “La mano que mece la cuna” y la historia en sí es paupérrima.

Después nos soltó la innombrable “11-11-11”, un castigo de Dios sin lugar a duda. La de “The Devil’s Carnival” todavía la tengo que ver así que me guardo la opinión.

A ver, “The Barrens” no es una puta maravilla ni pasará a formar parte de ningún tinglado de lista de lo mejor del año ni mucho menos. Hasta bien entrada la película, más bien diría hasta bien terminada la película no pasa casi absolutamente casi nada. Se cuentan un par de historias, un par de ciervos muertos y ya. Es tan solo en la recta final cuando se desvela todo el misterio y es cuando la cosa se pone interesante. Así que bien pensado, y después de redactar esto, las pilas las ha dejado a medio cargar.

Sí, me suele pasar esto, que al escribir una crítica de una película a medida que avanzo en la escritura me voy acordando de si me ha dejado huella o no, y creo que ésta solo me ha dejado la huella de volver a ver a Mia Kirshner y porque no decirlo al tipo de “True Blood”, Stephen Moyer, el principal conductor de la película y del que no puedo decir nada en contra.

Recomendaría “The Barrens” a toda esta gente que empieza a muy temprana edad a ver películas del género, para que se vaya acostumbrando a la narrativa de la que suelen tirar muchos directores: familia con problemas, historias de terror al lado del fuego, el monstruo… o simplemente para los espectadores ya curtidos que quieran pasar un rato entretenido sin buscarle una quinta pata al gato. Primero porque no hay gatos con cinco patas y segundo porque al terminar la película seguro que queréis un disfraz del Demonio de Jersey para el próximo carnaval.

 

jueves, 3 de mayo de 2012

The Reef




Director: Andrew Traucki, Michael Robertson
Argumento: Andrew Traucki
Actores: Damian Walshe-Howmling, Zoe Naylor, Adrianne Pickering



Buena película, en el  2003 nos llegó desde Estados Unidos la angustiosa Open Water, que nos narraba la historia de dos personas que quedan abandonadas en medio de un océano repleto de tiburones. Si cogemos esto y lo elevamos al cuadrado obtendremos como resultado The Reef, es decir, cuatro personas (más un secundario) en medio del océano esperando ser presa de los temibles tiburones.
 
Parece ser que el director Andrew Traucki tiene algún tipo de fobia infantil hacia los animales salvajes, ya que su primer film, Black Water , nos presentaba a un grupo de personas en plena selva australiana intentando sobrevivir a los ataques de un terrible cocodrilo.


La película parte con la siempre peligrosa premisa de basada en hechos reales, y nos cuenta como Suzie (Adrienne Pickering), su pareja Matt (Gyton Grantley) y Kate (Zoe Naylor) la hermana de Matt, van hasta la costa australiana para reunirse con el ex-novio de esta última, Luke (Damian Walshe-Howling).

Luke se dedica al transporte de barcos, y propone a sus amigos que le acompañen a él y a su amigo Warren (Kieran Darcy-Smith) a realizar una entrega en Indonesia, haciendo escala en el arrecife de coral más grande de todo el mundo, el “Great Barrir Reef”.


Los siguientes minutos los utilizaremos para ir conociendo un poco de la personalidad de cada uno de los protagonistas, ver unas impresionantes imágenes submarinas de los fondos australianos y comprobar cómo Kate y Luke comienzan a acercarse.

Pero pronto se acaba la tranquilidad, el barco choca contra un arrecife de coral y vuelca quedando dañado y sin posibilidad de volver a utilizarlo.

Los cinco chicos consiguen salir del agua y subirse a la quilla, donde deberán de tomar una decisión: quedarse allí esperando que alguien les encuentre y les puedan rescatar o intentar llegar a nado a una isla cercana que está a unos 15 km aproximadamente.


Ante la prácticamente nula posibilidad de que alguien les encuentre y ante el riesgo de que el barco se hunda o sufrir una insolación, los cuatro chicos deciden arriesgarse e intentar llegar a la isla nadando, dejando a Warren esperando en la quilla ya que tiene miedo a la más que probable presencia de tiburones en la zona y decide quedarse allí.

De aquí al final la película se convierte en una terrorífica lucha por sobrevivir en medio de un peligroso océano en el cual se van a encontrar con la presencia de un hambriento tiburón blanco.

Uno de los mayores defectos de la película es la inexistente presencia del factor sorpresa, ya que es muy fácil intuir el orden en el que irán muriendo y el momento exacto en el que se va a producir la muerte, y es que a pesar que intenta crear un clímax de tensión con la incursiones del tiburón, la banda sonora y las imágenes subacuáticas, se vuelve todo muy previsible y cada uno de los ataques está preparado con una alfombra roja.


The Reef es un film que utiliza una situación que nos podría pasar a cualquiera de nosotros, por lo que si consigues congeniar con los personajes y sentir su angustia lo pasaras realmente mal viendo la película.

Sus otros aspectos destacables son su excelente fotografía, nos ofrece unos increíbles paisajes y unas muy buenas imágenes subacuáticas, y el realismo de las imágenes en las que aparece el carcharodon carcharias, ya que para ellas se ha utilizado a un tiburón real.



sábado, 17 de septiembre de 2011

Island Claws











Como consecuencia de los habituales experimentos biologicos mezclados con la contaminacion producida de una cercana central nuclear sale un cangrejo, del tamaño de un camión, dispuesto a meter la pinza donde haga falta.

El super gigante, debe de tener  un caparazón de unos seis o siete metros de ancho, y con las patas a ambos lados, se debe de ir a una longuitud total entre extremo de una pata a la otra entre los 24 y 30 metros. Si extrapolamos el peso de un cangrejo normal de similar físico a las dimensiones de semejante monstruo, nos daría un peso estimado de unas 7.2 toneladas a 8.4 toneladas.

Ahora decidme en que lugar del mundo alguien ha hecho lo mismo que yo, y se ha tomado el tiempo de calcular el tamaño y el peso del monstruo. ¡Si es que la chuleria me pierde!

La película es como todas las de ese tipo de serie B: Paisajes paradisiacos, muchas palmeras y cocoteros, mucha playa, mucha arena, varias rubias de buen ver, y bastantes actores poco convincentes.

Por lo demás no espereis genialidades, un film de trama absorbente o escenas memorables, porque nada de ello hay aqui.


Lo mejor, como no, al final, cuando el cangrejote hace acto de presencia.

El bicho tiene una presencia tremenda, pero se le ve demasiado estático. Solo mueve sus ojos y de manera bastante lenta sus pinzas. Su constructor fue el especialista de efectos especiales Glen Robinson, que trabajó en el King Kong de 1976 de Dino de Laurentiis.

Otros films conocidos en los que trabajó Robinson fueron Meteoro, Terremoto o La fuga de Logan.
¿Porque titularon a este film en castellano La garra? Los cangrejos tienen pinzas, no garras, pues por consiguiente lo logico hubiera sido llamar al film Pinzas o algo así. Pero igual a los genios tras el título les pareció que no sonaba bien o impactante una película que se llamara "La pinza" y decidieron llamarla "La garra". Ver para creer.




miércoles, 11 de mayo de 2011

Day of the Animals

 

dayof
Day of the Animals – 1977

Director: 

 William Girdler

Escritor: 

 William W. Norton y Eleanor E. Norton

Actores: 

 Christopher George, Leslie Nielsen y Linda Day
Calificación: 7/10
 
Argumento

Esta película comienza con un mensaje ecologista alertando que en 1974 unos cientificos de no se donde han descubierto que se esta abriendo un agujero en la capa de ozono, por culpa de los gases de los sprays domesticos, etc... Total que el film es una advertencia de lo que puede suceder si ese agujero se hace grande y entran a saco en nuestro planeta radiaciones ultravioletas y cosmicas.

En el film se supone que todos los animales del mundo se vuelven locos y asesinos. Ahora sabemos, treinta años mas tarde, de que el agujero es tremendo y lo unico que pasa es que se deshielan los casquetes polares mas ràpido, que el clima se ha vuelto loco  y que las pistas de esqui se quedan sin nieve. Como mucho en unas dècadas especies articas como los pinguinos y osos polares, focas, etc... perderàn sus habitats naturales, pero no ha sucedido lo que pronostica de forma peliculera este film. Lejos de tanto dramatismo ecologico vaticinado en el film y que no nos engañemos, sirve como excusa para hacer un film de animales asesinos, la pelicula reune un gran reparto de actores de serie B, que juntos forman un gran elenco que se enfrentan a ataques de aguilas, serpientes, osos, jaurias de perros, etc...

La pelicula es una mezcla de film de aventuras, con mucha toma de animal por en medio, poco efecto especial, y con un cierto narrativo tono de fatalismo y supervivencia, para ver quien queda vivo al final tras tanta movida. Lo acertado del film (que si no fuera por el reparto seria una pelicula del montòn y casi televisiva) es que tiene interesantes trazos de ciencia-ficcion catastrofica, con la escena del helicoptero, o con las tropas evacuando una poblacion o explorandolo con trajes especiales anti-radiaciones o anti-contaminacion.

por momentos la película es un poco lenta, por otros amena, Leslie Nielsen se cabrea a pecho descubierto, y ahora, en estos tiempos que corren, muchas de las escenas se nos muestran como poco menos que absurdas o imposibles. Puede ser material para un remake hecho en condiciones, pero este original chirria demasiado por mucho aceite lubricante tres en uno que le pongamos. Un film solo para amantes de peliculas con cierto contenido o mensaje ecologista. A los de Greenpeace igual se les mola este producto flojo e ingenuo, que a pesar de ser hecho con astucia comercial, les faltò picardia de serie B, para inyectar mas sangre y substancia al asunto, que como digo, quedò demasiado tibio y edulcolorado para toda clase de audiencias.
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