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La increíble épica

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domingo, 11 de septiembre de 2011

Trancers







Esta película no presenta a Jack Deth, que es una especie de Blade Runner que caza “trancers”, una especie de zombies creados por un Mad Doctor. Sin embargo, por algo que pasa y no tampoco importa demasiado, Deth debe viajar en el tiempo a 1985 y acabar con la amenaza “trancer” en el pasado... lo que pasa es que Deth se reencarna en ese pasado en un antepasado suyo, quedando su cuerpo en el futuro en una especie de animación suspendida.




















En ese ambiente del futuro, el malvado logra escaparse al pasado a Los Angeles de mediados de los 80, y por tanto Jack Deth hará lo mismo para evitar que se cumpla el terrible plan del malvado.

Y aquí comienza lo alucinante: el medio de viajar al pasado, tan original como absurdo.

Resulta que se tumba al sujeto en una cama, se le inyecta una droga, y mediante esa substancia la mente del sujeto retrocede al pasado, poseyendo un cuerpo de un antepasado, que ahora tendrá la mente del viajero del tiempo.

En Los ángeles de los años 80 Deth encontrará ayuda, apoyo y amor en una preciosa Helen Hunt.

Un ingenioso cachivache que tiene el amigo detective es un reloj de muñeca, que cuando lo activa convenientemente hace que un mero segundo se dilate, haciendo que dure como medio minuto. Es decir, que durante ese segundo todo va como a cámara lenta, haciendo que jack sea capaz de por ejemplo, evitar la muerte de su amada.

Detalle divertido es que mientras el protagonista se reencarna, o mejor dicho se retro-encarna en un antepasado idéntico a él, su jefe no corre esa misma suerte y su mente va a parar a una antepasada: una niña rubia jovencita. ¿?

En fin... Trancers es un film bastante disparatado, descacharrante y de guión lo suficientemente tóxico como para hacerte pasar un rato bastante ameno, dentro de las evidentes limitaciones presupuestarias de esa película que costó como 400.000 dólares allá en su tiempo.

Su propuesta hizo que se generaran cinco secuelas, por lo que tan malo no era la película digo yo.


viernes, 12 de marzo de 2010

The Lost Boys


































Corey Haim, un increible joven actor de los 80,  protagonizó muchos films muy recordados de aquella década. Luego, con 38 años, el niño prodigio ya hombre, murió de un ataque cardiaco producido por una sobredosis de drogas, justo antes de iniciar un nuevo programa de rehabilitación, según palabras de su manager. Una lástima.

Un CLÁSICO de culto esta película.

Que alguien muera es siempre triste. Pero ver como un joven actor que era excelente, super-carismático, y que tenía un gran futuro por delante, como muere a causa de las drogas y de los excesos, tras una vida llena de problemas con adicciones, es realmente trágico.

Corey Haim protagonizó este film junto al otro Corey de la época, Corey Feldman, una película DE CULTO y adorada por muchos: Jovenes ocultos.

Jóvenes Ocultos es una EXQUISITA jugada comercial que tiene bastantes paralelismos con productos actuales como Twilight pues comparten basicamente una misma fórmula.

A) Un montón de jóvenes guaperas

B) Viven aventuras en su propio mundo, en el que los adultos cobran un papel secundario

C) Una romántica historia de amor entre humanos y vampiros

D) Un ambiente elegante y fashion, con las últimas tendencias en moda, ropa y peinados

E) Una violencia y terror moderada y contenida, apta para un público joven y adolescente

F) Elementos de humor

G) Peleas entre vampiros buenos y vampiros malos

H) Nos muestran un mundo de vampiros sin reglas, que rompen con el mundo real, viviendo esos jóvenes "especiales" una vida excitante y al límite

Como podeis comprobar ambos films COINCIDEN con todo.

La cosa es que Jóvenes Ocultos tiene un argumento sencillo pero efectivo. Una familia se muda a la costa oeste de Estados Unidos, a una dicharachera ciudad llena de gente extravagante y fashion, con ganas de marcha y se ven metidos en un embrollo con una tribu urbana de vampiros rebeldes y super-fashion, capitaneada por Kiefer Sutherland.

La película muestra parques de atracciones, carreras de motos, puenting, montañas rusas, playas, conciertos, fiestas, etc... ¿En qué coinciden todas esas cosas? En que les molan a los jóvenes. De paso varias escenas suceden en un videoculb y en una tienda de comics. ¡Comics y pelis en vhs! ¡El paraiso de aquella juventud de los 80!

Se desarrolla una historia de amor entre humano y vampira, y resulta que el hermano pequeño del mayor que será vampirizado, decide ayudarle con un grupito de niños astutos e intrépidos que se enfrentarán a los vampiros. ¿Os suena eso de algo? ¡LOS GOONIES!

No en vano el productor de este film es Richard Donner, el director de Los Goonies, film de 1985, estrenado dos años antes que este Jóvenes ocultos. Ver la foto que incluyo que a modo de guiño incluyeron en el film una secuencia en la que sale la portada de la película de Los goonies.

Pero ese no es el único guiño del film pues sale algunas veces una imagen de Jim Morrison, el mítico cantante de The Doors, que como no conocen muy bien Richard Donner y Joel Schumacher pues a mediado los 60 (Jim Morrison murió en el 71) cuando The Doors se hizo famosa, Richar Donner contaba con 35 años y Joel Schumacher con 26 años. Jim Morrison fue todo un personaje, de gran personalidad, y todo un símbolo de rebeldía, inspirando al grupo de vampiros al margen de todo, viviendo al límite y según sus propias reglas, rompiendo con las impuestas por la sociedad.

La película cuenta con sus momentos cómicos, como la cena en la que los niños intentan desenmascarar a un vampiro con unas tretas disparatadas. En el tercer acto del film los niños cobran protagonismo (y como en Los Goonies) y serán los que salvarán tanto a los adultos, como al hermano vampirizado, de la amenaza de los chupasangres rebeldes.

Como ya he comentado el terror en el film es contenido, sangre la justa, gore el mínimo y todo el conjunto es una fantasía adolescente medio terrorífica en clave vampírica.

Por supuesto y a pesar de la disparidad de los elementos que componen este largometraje, la cosa funciona y crea su química, cosa admirable. Personalmente creo que Jóvenes Ocultos es en realidad una versión vampírica de Peter Pan.

"Duerme todo el día. Estate de fiesta toda la noche. Nunca te hagas viejo. Nunca morirás" ¿Cojonudo, verdad? Eso me suena muy rollo Peter Pan en el que Campanillas es en realidad Kiefer Sutherland en un rol ambiguo de soy tu amigo y te haré inmortal, pero si no me sigues el rollo y me jodes mi movida, te sacaré la piel a tiras.

En 1987 esta película recaudó 32 millones de dólares en cines USA, con un presupuesto estimado de 15 millones. La cosa arrojó buenos resultados comerciales, pero muchos críticos vapulearon el film diciendo que era muy visual y lleno de imágenes preciosas para la retina del espectador, pero que lo que es substancia, la película tenía muy poca.

Yo no me posiciono tan radicalmente. El film es lo que es y tampoco se le puede pedir mucho mas. Se trata de un producto comercial, de entretenimiento, que pretende hacer pasar un rato divertido y agradable al espectador.

Años mas tarde, The lost boys, traducido literalmente como Los chicos perdidos, tiene su reflejo en la sociedad actual pues todos los que vivimos los 80 somos los chicos perdidos de una década maravillosa que nunca mas volverá. Por eso The lost boys es un título tan querido, venerado y visionado: es en el fondo un trozo precioso de nuestro pasado, un trozo de espejo en el que nos reflejamos en mayor o menor medida, de todos aquellos que tenemos ahora 50 o 40 años.

El golpe final del abuelete que lo sabía todo es genial. En principio no era ese el final del film, pero la escena surgió durante el rodaje. Se pensaba en rodar un final tipo El resplandor, en que en un hotel abandonado, en un mural del principios de 1900, se veía los vampiros juntos, dándose a entender implícitamente de que tenían como mínimo un siglo de edad. Si os fijais cuando Kiefer muere empalado no explota en llamas, pues se pensaba recuperar su personaje para una hipotética secuela que nunca se llegó a rodar ni en los 80, ni en los 90, pese a los esfuerzos de Joel Schumacher para hacerla realidad y como no, dirigirla él mismo.







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