Esta película es un trabajo de realización impecable, con soberbias persecuciones y escenas bastante cargadas de adrenalina, Michael Crichton nos alerta de un futuro altamente tecnológico, principal discurso que se extrae de este thriller futurista. ¿Hasta qué punto sustituirá la máquina al hombre?. ¿Es más fiable?. ¿Debemos controlar más nuestra autosuficiencia, o utilizar la tecnología para vivir más cómodamente?.
Una cosa que siempre digo es que una cosa es saber como funciona una cámara, como se toma un plano, como se rueda un film y como es la post-producción, y otra cosa es tener el talento de dar vida al complejo proceso de un rodaje y convertirlo no en algo mecánico y rutinario, sino en algo emocionante y auténtico a los ojos del espectador.
La película va de una brigada especial de la policía que se dedica a neutralizar robots homicidas o peligrosos para los humanos bien porque se hayan vuelto locos, se hayan averiado y o porque llanamente sean controlados por malvados para perpetrar actos criminales y oscuros.
Y eso es el film... Nuestra pareja de protagonista, Tom Selleck y la rubia hermosa que le acompaña, Cynthia Rhodes (dejo su carrera como actriz a finales de los 90 y se dedico a ser ama de casa a tiempo completo y ahora vive en Chicago con su esposo y tres hijos) se las ven con robots agricolas o ropots mayordomos, hasta que ya caliente el film entra en escena el malvado Gene Simmons (miembro de la famosa banda Kiss) que manipula robots y desata el terror en la ciudad... Como os imaginais la parejita de policias serán los encargados de detener al malvado.
El film lo que se dice a nivel de fotografía es aceptable, y la producción es bastante abundante en cuanto a medios. Sin embargo de lo que debería de hacer gala y ondear como bandera en el film, es al contrario el aspecto mas pobre, y no es otro que todos los elementos futuristas, incluidos los robots.
En una de las escenas vemos un robot homicida de una casa que empuña un Revolver del 38, un arma de lo mas clásica y que tiene ya mas años que mi abuela, y Tom Selleck se lo despacha con un rayo laserr, lo gracioso es que si contais los disparos, el robot dispara ocho veces, cuando el tambor del revolver solo lleva seis balas. ¿Cómo es posible eso? Digo yo que igual el robot imitaba un sonido de los disparos con sus altavoces para acojonar al policía cuando se le acabaron las balas.
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